Vaya día el de ayer para el
deporte francés. Por la mañana, la Copa Davis. Por la noche, el Eurobasket. Y en
ambos casos un mismo protagonista, el brazo ejecutor de los españoles (y nunca
mejor dicho).
Ha sido un europeo de
baloncesto difícil de seguir en cuanto a horarios se refiere pero ha merecido
la pena todo el esfuerzo realizado para ver cualquier partido de la selección
española.
En un Eurobasket que, gracias
al lockout del NBA, contaba con el mayor número de jugadores de la mejor liga
del mundo, los integrantes de la Roja sobresalían sobre los demás. Y en
especial, nuestro capitán. La exhibición de la “Bomba” Navarro a lo largo del
torneo ha sido, simplemente, espectacular.
Tras haber dejado atrás a
Eslovenia y Macedonia, ayer era el turno para la Francia de “Olalá” Parker,
Diaw y Noha. Sinceramente, no tuvieron ninguna opción a lo largo del partido. La
aportación de Calderón, Pau, Rudy y sobre todo un inmenso Ibaka secaron al
equipo francés a lo largo de los cuatro cuartos.
He de decir que durante los últimos
minutos lo pasé algo mal, esperando que saltase a la cancha “Espartaco” Reyes,
uno de los capitanes, y que se merecía y mucho jugar la final tras haber
realizado un buen torneo. Finalmente en un bonito gesto de Scariolo, todos los
jugadores pudieron disfrutar de algún minuto en la final demostrando que España
es un equipo en todos los sentidos.
Gracias a Pau, Marc, Rudy,
Juan Carlos, José Manuel, Felipe, Serge, Ricky, Sergio, Fernando y los dos
Víctor.
0 comentarios:
Publicar un comentario