Como ya nos ocurriera con la ciudad que nunca duerme, otra oportunidad que no podíamos dejar pasar se había presentado ante nuestros ojos con la estancia de Vishal en London. Así que Sandra y un servidor fuimos a hacerle una visita y ya de paso conocer la capital del Reino Unido. Por supuesto, antes de continuar, quiero agradecer a Vishal y a su compañero Rohit la magnífica acogida que nos dieron en su humilde morada londinense.
Tras nuestro paso por New York, las comparaciones eran inevitables. Algo lógico por una parte pero completamente innecesario. Así que una vez que dejamos las comparaciones a un lado disfrutamos de la ciudad como se merece. Y es que London es una de esas ciudades que te va conquistando poquito a poco.
Esas callejuelas de Sherlock Holmes y Mary Poppins son la esencia de una ciudad bañada por el Támesis que tiene al Big Ben como pieza angular. Sí, ese Big Ben que es escoltado desde la otra orilla del río por el London Eye y por Horatio Nelson desde su columna en Trafalgar Square.
Ha sido una gran semana en la que hemos pateado muchos de los rincones de la ciudad junto a un maravilloso guía (que hacía las veces de traductor). ¡Muchas gracias por todo Vishi! Nos despedimos con un “hasta luego” porque volveremos cuando menos te lo esperes…
P.S.: Por cierto, mirar a los dos lados antes de cruzar…
Ni una mencion a Brick Lane, ay como despues de una semana alli no hayais ido...
ResponderEliminarMe temo que lo hemos dejado para la próxima vez...
ResponderEliminarNo habia tenido ocasión de leerlo antes. Muchas gracias a vosotros por la visita. Esta es vuestra casa! Aquí os espero cuando queráis.
ResponderEliminarQue espectaculo para los sentidos el Big Ben de noche... verdad Mary Popins ...
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