Domingo 11 de julio de 2010. 20:30 horas. Estadio Soccer City de Johannesburgo. En ese instante, el país entero se detendrá durante dos horas esperando el mismo desenlace. Ser campeones del mundo.
En frente estarán los tulipanes, quienes llegan a la final sin haber perdido un solo partido y queriendo emular a Brasil del 70 haciendo un mundial perfecto. El reto por supuesto no será fácil, pero al igual que en la Eurocopa ¡Podemos!
Ahora ya da igual que perdiéramos el primer partido contra Suiza. Me es indiferente que Del Bosque siga con el planteamiento cagón de dos mediocentros defensivos. No me importa que Sergio Busquets siga jugando todos los partidos de titular… bueno a lo mejor me estoy pasando. En realidad sí me importa ya que me sigue sobrando en la selección, pero bueno, digamos que me he acostumbrado.
El caso es que ya hemos hecho historia. Hemos llegado a la final del mundial de fútbol, hecho que no se había logrado antes. Estamos felices por ello pero… queremos más. Queremos lucir nuestra primera estrella encima del escudo. La estrella que diga que somos campeones del mundo. Queremos ver cómo Casillas es el primero en besar la copa (y a Sara Carbonero también) y queremos ver cómo la alza al cielo proclamando que somos los campeones.
Por cierto, el pulpo Paul ya ha hablado y ha dicho que el campeón del mundo será… ¡España!
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España perdió el primer partido y ganó todos... Holanda ganó todos y perdió el último.
ResponderEliminarYo me tengo q comer mis palabras con Busquets... es de ley.
NUESTRA!!!!
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